Collage Literario #6: La pampa argentina como refugio de un corazón roto
En "Los llanos", Federico Falco habla sobre el duelo de un amor, sobre el duelo de quiénes supimos ser y sobre cómo tenemos que juntar nuestros pedazos para volver a armarnos a nosotros mismos.
Espero que con este frio ya hayan inaugurado la temporada de guisos y vino, y si no es así, todavía queda tiempo para que empiecen a disfrutar de lo poco lindo que tiene este clima.
Durante los últimos días estuve pensando mucho en la pampa argentina, en los dos talleres de lectura que estoy dando apareció como paisaje de las historias que leímos. Además, empecé a leer Los galgos, los galgos para el taller de junio, así que todas mis lectura me trasladaron a ese territorio que es un icono de la literatura argentina. Me gusta mucho toda la literatura que tiene como escenario el campo, me gusta ver las descripciones de esa llanura en donde muchas veces aparece la soledad. Una soledad que a veces resulta aterradora, pero que otras veces es una soledad en donde los personajes encuentran cierto alivio y belleza.
Pensando en todos estos temas, se me apreció la novela de Federico Falco, Los llanos (2020), que leí hace algunos años en un viaje al sur. Federico Falco nació en General Cabrera, Córdoba; y antes de publicar la novela de la que les quiero hablar hoy, publicó varios libros de cuentos y una novela breve llamada Cielos de Córdoba (2011). Me gustaría decir que leí todo sobre este autor, pero todavía lo tengo pendiente. Lo que si puedo decir es que Los llanos me llevó a lugares que fui cuando era chica y que, entre la tristeza y la soledad que experimenta el protagonista, encontré cierto alivio. Frente a la tristeza que siente, el protagonista decide mudarse al campo, en un pueblo del interior de Buenos Aires, Zapiola, para sanar el dolor de una separación, y ese gesto me parece de una belleza inigualable. Hay veces que nos acostumbramos a la tristeza, pero hay otras en las que decidimos hacer algo para salir de ese sentimiento permanente. Y esos gestos creo que muchas veces nos definen.
El narrador se pregunta “¿Cómo escribir una historia entre los escombros de una historia?”, una pregunta que se hace el propio Federico Falco y que busca responder a lo largo de la novela. Los llanos nos cuenta en primera persona el duelo de un amor y, en definitiva, el duelo de quién supo ser el propio protagonista porque uno/a deja parte de si cuando un vínculo termina.
En las primeras páginas, conocemos al narrador que se encuentra en una casa de campo en Zapiola, un pueblo de la localidad de Lobos, Provincia de Buenos Aires. Poco a poco vamos viendo cómo se arma su rutina en esa casa y paisaje que le resultan igualmente ajenos y familiares, porque durante su infancia pasó tiempo en el campo en la casa de sus abuelos. Pero ahora es otra casa, es otro campo y él mismo es otro.
¿Por qué decide irse desde la ciudad al campo? Porque tiene el corazón roto y no sabe qué hacer con su vida. Acaba de terminar su relación con Ciro y ambos atraviesan ese dolor de formas diferentes. Ciro necesita distanciarse y nuestro protagonista necesita entender qué pasó, por qué ese amor que se tienen ya no alcanza para que sigan juntos.
Entender traería algo de alivio: una cadena lógica de acciones, un relato, algo que lleve a un clímax, un enfrentamiento, una crisis, una historia donde las motivaciones de los personajes sean evidentes.
Eso es lo que faltó. Eso es lo que no está.Nada lleva al tercer acto. Ningún punto de giro que explique.
Frente a ese dolor y a esa falta de entendimiento, él decide irse. Y no se va a cualquier lugar: se va al campo, escenario de grandes historias de nuestra literatura nacional, como si allí pudiera encontrar una explicación. Ese movimiento es el que más me gusta, vuelve al territorio que tantas preguntas y tantas respuestas nos dio a lo largo de nuestra literatura, porque Falco es un gran lector de literatura argentina y sabe que ahí están todos nuestros dolores y nuestros amores. Ahí se gesta nuestro origen y cuando estamos perdidos, volver al inicio es una forma de encontrarnos.
La novela nos cuenta eso: un persona que se aleja para poder verlo todo con otra perspectiva, porque la ruptura con Ciro genera que se pregunte sobre sí mismo. Por momentos, podemos vislumbrar recuerdos de su relación con Ciro, cómo eran sus días antes de irse a Zapiola. Pero la mayoría del tiempo estamos con él ahí en el campo, viendo cómo transcurren los meses, cómo cambian las estaciones. El paso del tiempo nos lo va a narrar a partir de su huerta con la que se obsesiona: aprende qué plantar según las estaciones, cómo hacer el trabajo manual, cómo es el crecimiento de cada una de las plantas. Y es cuidando esa huerta como va sanando sus heridas. Es esa rutina que nos propone el campo, una rutina que nos resulta monótona pero que a su vez se va modificando con los cambios de estación, donde el protagonista encuentra un refugio. La quietud de la rutina es a veces lo que necesitamos.
No se puede controlar una huerta y eso a veces me exaspera. La huerta no crece de mi deseo, sino de su propia potencia, la potencia de la semilla, y se da en medio de accidentes. Con la escritura pasa más o menos lo mismo: a veces, al escribir, tenía la ilusión de que controlaba el texto pero en realidad todo se daba de una manera en que casi me excluía: brotaba lo que podía en medio de mis propios accidentes, mi neurosis, mi cansancio, mi vagancia, mi temor a qué van a decir, ¿se aburrirán?, qué van a pensar de mí, mi miedo a que no les guste, a que cierren el libro a la mitad y no sigan. Son traspiés no tan diferentes a la sequía, o el viento, o el granizo.
Además, la lectura, la escritura y la pregunta sobre cómo se cuenta una historia, también lo van a acompañar durante su estancia en el campo. Hay fragmentos de esos textos que lee que se asoman en la novela, Falco transcribe esas citas, que nos dan cuenta de cómo la literatura, o la ficción en general, nos ayudan a entendernos a nosotrs misms. La ficción nos incomoda muchas veces, y otras tantas descubrimos que otro/a encontró palabras precisas para describir eso que estamos sintiendo. Lo que el narrador encuentra en esas lecturas, es lo que yo encuentro en Los llanos. Hay una cercanía emocional con el protagonista, nos vemos reflejados/as en esas emociones que describe y ese consuelo que encuentra. Ahí radica la belleza de esta novela. No nos cuenta nada y a la vez nos cuenta todo.
Contar una historia cambia a quien la cuenta. Y por momentos la ficción es la única manera de pensar lo verdadero
Hay algunas coincidencias biográficas del autor con el propio protagonista de la novela, pero no sabemos si hay algo de autobiográfico o no en la novela, y en definitiva no importa. Lo que si podemos ver es cómo el protagonista, y por extensión nos podemos encontrar en ese lugar, va atravesando el duelo de ese vínculo. La muerte no es la única forma que nos lleva al duelo, toda nuestra vida atravesamos el duelo por vínculos que perdemos, e incluso por nosotros/as mimos/as, esos que éramos y ya no somos. Ojalá siempre encontremos un campo que nos refugie, una huerta que nos marque el paso del tiempo y la literatura que ponga en palabras lo que parecía inenarrable.
Talleres de junio
La semana pasada les compartí los talleres de lectura que voy a estar dando en junio. Vamos a leer a dos autoras argentinas que me gustan mucho. Si ya las leyeron les prometo que se van a llevar lecturas nuevas; y si no, no sé qué esperan para venir a conocerlas.
Acá encuentran toda la información sobre días, precios, la dinámica del taller y qué textos vamos a leer.
Si quieren saber algo más sobre los talleres, me puede escribir. Si quieren mandarme recomendaciones o comentarios sobre el newsletter también. Bienvenidas sean las nuevas lecturas.
Gracias por leer #Collage Literario♥♥♥
Si te gustó, podes compartir este newsletter al mundo entero. Si queres recibirlo directamente en tu mail, no te olvides de suscribirte
Nos volvemos a leer en 15 días.
Dani ♥
Qué lindo lo que decís sobre ese libro que me gustó tanto! Lo leí en pandemia y lo amé. El año pasado leí Cielos de Córdoba y tengo sus cuentos por leer
Me emociono💕💕